viernes, 16 de septiembre de 2016

Dudas.

Tiene poco menos de un mes que un chico me escribió una retahíla de frases casi adoratorias , admiradas , aduladoras hasta lo vergonzoso. Dijo conocerme de hacía muchos años, conocía mi nombre y cosas que apenas están en mi memoria pero aún sé , mías. Lejos de la descortesía, su existencia me era completamente desconocida. Su discurso me afectó de una manera muy íntima, el lugar más ocultado , más frágil de mi persona se sintió conmovido e intenté ser amable, cuidadosa en preguntar exactamente por qué me conocía,
Si fuimos juntos en la misma preparatoria, besábamos a la misma mujer, vivimos muchas cosas juntos, eras tan dulce... Me lo afirma, y en realidad no tengo idea de qué significa eso. Hay espacios de tiempo que abarcan meses enteros que simplemente no puedo recordar, no podría ubicarlos en ningún momento de mi vida, basicamente porque toda está deshecha en mi memoria.
No conservo ninguna foto de entonces. Hay años completamente borrados de la historia y simplemente no podría afirmar que entonces existía ¿ dónde estaba? ¿ quién era? Intento reconstruir una historia pero a falta de pruebas y recuerdos, apenas constituye una pobre leyenda. No puedo recordarlo, y apenas puedo contener el dolor en el cerebro cuando lo intento. L dice que es la manera que tiene mi cuerpo de protegerme de aquello que todavía no puedo manejar. Intento ser más fuerte que ese desconcierto, y conservando las cordiales y el coqueteo, le invito a algún bar un día próximo. Postergando él mismo los días una y otra ocasión, finalmente me bloquea de la red social donde él mismo me buscó.
Estoy destrozada , me hubiera gustado decirle, y no tienes idea de cuán frágil es mi cerebro ante cosas como esta. Así se sobrevive, olvidando, negando y asumiendo que somos lo que somos. No lo que pudimos, ni lo que fuimos. Tomé lo poco que sobrevivió dentro mío y me di a mí misma esa segunda oportunidad con su descripción, torpe y herida.Soy un monstruo, soy una puta y no puedo lidiar con nada más. No recuerdo haber sido alguna vez buena ni dulce, ni suave. Tengo la cara muy dura porque es el precio que se paga por haber vivido. Me convencí que la vida me orilló a ser fuerte para cuidar todas las cosas frágiles que amaba y dependían de mi entereza, para acallar el rencor y despecho de no haber tenido en quién refugiarme, en quién ocultarme cuando era yo la que necesitaba ser protegida. Abro las piernas fácil, me hubiera gustado decirle, no es necesario adularme porque conozco perfecto mi lugar en el mundo. Ignora las medallas, ignora los logros vanos que únicamente importan en una fría tarjeta de presentación. No tengo límites, pierdo el control con facilidad, así que puedes tomar ventaja de lo que quieras sobre mi persona . La culpa ante cualquier mirada siempre será mía.No te alejes de esa manera porque voy a obsesionarme, le hubiera advertido, y ni siquiera es que lo deseé, todavía no estoy lista para saber que alguien posee un fragmento de mi imagen que olvidé y lo necesito.
Necesito que me digas quién mierda era entonces, en qué punto me extravié. Si es verdad que la decisión fue mía o no tuve alternativa. Por favor, no te alejes sin contarme lo que sabes. Porque algo que yo sé y no tuviste la delicadeza de escuchar, es que llevo años emocional y mentalmente destrozada. Y no soporto que se alejen. Le tengo pánico a la persona que soy ahora ¿ en verdad alguna vez fui algo mejor que esto?

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